NOTA ACLARATORIA
En la edicion PDF de QAWAQ # 18, se puso una presentacion explicatoria del presente artioculo que aludia a un mal estado de salud del hermano Jorge Alberto Montoya Maquin.
Debo aclarar, asumiendo las responsabilidades del error, que tal informacion es incorrecta ya eu nuestro hermano goza de buena salud. Tal error se baso en una apreciación subjetiva mia, correspondientes a hace ya dos años , en que pudimos vernos. Me alegra que todo este bien y me alegra estar equivocado al respecto.
El hermano Jorge Alberto Montoya, continua su labor de investigacion sobre la tematica cultural andina y esperamos poder contar pronto con sus invalorables aportes.
Juan Francisco Tincopa Calle
Personas Responsables
Jorge Alberto Montoya Maquin escribió este material como parte de un proyecto extenso de libro: DE LOS SABERES DEL MUNDO; algunos de cuyos articulos publicamos anteriormente en QAWAQ, pero debido a la pertinencia del tema en esto momentos lo volvemos a poner a consideracion de nuestros lectores, con el titulo de: ‘Personas Responsables’, porque el trasfondo de todo el tema de ordenar o direccionar en nuestra cultura andina se entiende muy diferente que en la cultura occidental y tiene mas que ver con el concepto de responsabilidad. como se podra apreciar.
AMA Y MAMA;
KAMAQ, KAMACHIK.
Por: Jorge Alberto Montoya Maquin
En los runasimi conocidos como aymarás y kechwas, existe también una pareja de palabras, que pueden constituirse, como raíces, que nos pueden ayudar a visualizar adecuadamente la raíz griega “nom” o “nomos”. Se trata de AMA y MAMA.
En las lenguas originales de los andes, como también puede ser en el de otras regiones, entre otros aspectos, los sonidos se entrelazan y tejen, y entre otros enlazamientos de éstos sonidos, existe uno que por ejemplo, enlaza AYA con YAYA, ACHA con CHACHA, AMA con MAMÁ; en éstos casos, cuando A ampara desde las partes de afuera, lo que dice es el origen, la fuente, en la cual se cobija el otro sonido; cuando hace la repetición del sonido con la A al final, dice la manera como ésta se manifiesta.
“Por ello AMA es, entre otros aspectos, una especie de inversa, o una pareja, o un lado parejo, de MAMA.
Sí MAMA, o MAMÁ, es aquella que nos amamanta, que nos cría, que nos engendra en su matriz y que asegura nuestra crianza y alimentación para que nos logremos en esta vida. Sí ella, MAMA, es no sólo un ente físico, sino una manera de ser y de hacer, que consiste en hacer que contemos siempre con lo adecuado, sean estos alimentos y / o cariños; AMA, es la raíz, que sustenta al árbol que es MAMA; o AMA, es el huevo o la morada donde ella está alojada cuando descansa, y de la cual brota para ser MAMA; o AMA, es el cimiento o fundamento del monumento o edificio, que es MAMA.
En otras palabras también podría asimilarse a algo parecido a lo que llaman un gen que es responsable de alguna cualidad o característica. Quizás para no errar en esta interpretación hay que entender también que tan responsable es el gen de una característica o cualidad determinada, como la característica o cualidad, de que se engendre un gen de esa naturaleza. Una pareja así, se hace porque ambos lados conversan, confluyen, versan o hacen versos, no porque un lado es el responsable o la causa unilateral del otro.
Otra manera de verlo, es que AMA es lo que está en la profundidad de MAMA. Es el sentimiento, el alma, el ánimo, la manera de ser y de hacer de MAMA, de la madre.” ()
Ama es el Principio, Mama es el Fin o la Finalidad; Ama es la Semilla, Mama es el árbol.
Kamaq también es una palabra, un concepto, un sentimiento, una manera de hacer, que es parte de las lenguas, conocidas como aymarás y kechwas.
“Entre otras muchas maneras de sentir y entender lo que dice kamaq, lo podemos hacer de la siguiente manera:
K AMA Q
La K, su sonido y el lugar que ocupa al comienzo de la palabra, dice de la capacidad que tiene alguien de hacer algo.
La Q, su sonido y el lugar que ocupa al final de la palabra, dice de lo que uno está haciendo.
Cuándo algo o alguien, como es el caso de palabra y sonido AMA, está enlazada de esta manera por K y Q, (K al comienzo, y Q al final), es decir haciendo la palabra KAMAQ, lo que dice todo el conjunto o agrupamiento (palabra KAMAQ en este caso) es de alguien que tiene la capacidad de AMA y la hace o ejecuta.
AMA, de alguna manera le da el “contenido” a la pareja K - Q.
Así mismo, en este caso, si AMA es algo, la manera como este algo se está haciendo (ya que el mismo puede hacerse de varias formas) se lo da la pareja K - Q. Lo que podría ser dicho como que la pareja K - Q, le da el “sentido” a AMA.
Toda palabra o sonido es siempre raíz, mantiene esa función y, aunque se enlace con otros sonidos, nunca pierde su idiosincrasia.
Para el caso que estamos analizando, la terminación “chik”, es más o menos parecida a la “q”.
Un Kamachik, ha sido traducido muchas veces al castellano como aquel ser que sabe hacer algo, que lo hace bien. Es decir, que lo sabe hacer, tiene la capacidad de hacerlo, y lo hace adecuadamente. También se dice que un Kamachik es un servidor, un sirviente, un buen sirviente.
Puede haber un Kamachik del agua o del riego. Él, es el que sabe hacer el riego, que puede, en un ayllu, marka, o un caserío, repartir el agua de riego para que todos tengan lo necesario, o lo que es adecuado, en alguna circunstancia determinada. Hay kamachik de la salud, de las ceremonias o celebración de algún acontecimiento, de la siembra, en fin, de cualquier actividad. Kamachik es el que sabe y puede hacer algo, y el que lo hace adecuadamente.
Por ello, entre muchas acepciones “kamaq” dice, o significa:
a) Que sea suficiente, que alcance. Kamaq que ha sido traducido la mayoría de las veces como “ordenar”, “indicar”, “mandar”, es “ordenar”, “indicar”, “mandar”, pero para que sea suficiente, para se haga lo adecuado. Como hace una madre cuando cría a sus hijos. No es repartir por igual, sino de acuerdo a cada quien, y a lo que se tiene disponible. Kamaq es una “orden”, una “indicación”, un “mando”, pero que tiene el alma, el ánimo, de AMA; de AMA que es la mama de la mama, la madre de la madre. Por eso también, “kamaq” puede ser traducido como un “regalo”, un “brindis”, un “obsequio”.
b) El segundo aspecto que es bueno resaltar, es que esa orden, indicación, mandato, regalo, brindis, u obsequio, no es una orden, indicación, mando, regalo, brindis, u obsequio, que se puede hacer de cualquier manera y con cualquier resultado, sino que es un encargo, que sea hace para que lo que se hace sea suficiente para todos los que participan en dicha actividad o circunstancia, sin perjudicar a nadie. Para que lo que se hace sea lo adecuado.
c) Un tercer aspecto que es adecuado resaltar en esta oportunidad es que el quehacer de “kamaq” está vinculado con lo disponible, con lo que se dispone. Lo disponible es siempre lo que nos será adecuado. Por ello su entendimiento no calza con los criterios o las nociones de escasez o de exceso (la abundancia a veces se la asimila a lo excesivo, pero no es exactamente lo mismo). “Kamaq” no es la administración adecuada de “recursos” escasos. Tampoco es la administración adecuada de “recursos” excesivos (“abundantes”). Haciendo la dicotomía escasez - exceso, no se puede entender y sentir lo que es “kamaq”, por que dicha dicotomía surge de un sentimiento hacia el mundo en el que se siente y se entiende que éste no es aparente, ya que unas veces es carente y otras excesivo. “Kamaq” está emparejado con una manera de sentir el, y al, mundo aparente, adecuado, en cual, entre otros aspectos, nada, ni nadie está ausente, ni nada, ni nadie, está demás o sobra. Por ello también, este sentimiento está ligado con el hecho de vivir agradecido de la vida, de celebrar la vida, no de maldecirla.
Sí traemos algunos ejemplos de cómo empleamos Kamaq hasta el día de hoy, quizás podremos sentir mejor lo que dice Kamaq. ()
Si una “mamita” (señora) está encargada de la comida en alguna circunstancia, puede decir a un muchacho que está encargado de servirla:
“Kayqay mikuyninchik
llapamqaq kamachinki.”
Cuya acepción en castellano sería:
“Aquí tienes nuestra comida, haz de hacer que sea suficiente para todos.”
También podría decir:
Kayqa “doce” llapanman kamachinki.
Que en castellano sería:
Aquí está el “almuerzo”, haz que alcance a (que sea suficiente para) todos.
O también podría ser decir lo siguiente
“Kayqay “doce”
kamachikunki.”
Que sería en castellano:
“Aquí está la comida del medio día, hazte alcanzar (haz que alcance) (haz que sea suficiente)”
En otro caso se podría estar al inicio de una faena de siembra y la semilla disponible no sería mucha, entonces el encargado de dirigir la misma podría decir:
“Oka muquyqa asllañan aypuqni tantiakuspa kamachinqa”.
Es decir:
“Mi semilla de oca está poca, el que reparte calculará para hacer que alcance (que sea suficiente)”.
También podría suceder que lo disponible sea bastante abundante, entonces podría decir:
“Saranchikmi maqtaq mirarun kay wata; tipiqkunatam kamachinki, yanqataq usuchinkuman”.
O sea:
“Nuestro maíz se ha reproducido bastante este año; a quienes cosechen haz de ordenar (indicar), que no vayan a desperdiciarlo”.
En otro caso puede suceder, como sucedió, que un encargado, uno que tiene un cargo (Alcalde o Varáyoc en este caso), en la celebración de la Sekia, en Puquio, se encuentra con una situación en la que hay distintas alternativas y por ello hay que tomar una decisión. El del cargo, por ser kamachik, toma la decisión y ordena para que se haga lo adecuado (lo correcto).()
“Sekia varoyoc (alcalde) miki kamachikuchkan imainam kunan angosayta kay chaki qochapi ruasun”.
Es decir:
“El vara de la sekia pues, está ordenando (indicando) como haremos el angosto ahora en este estanque seco (sin agua)”.
Una profesora, también puede mandar. Podría decir así a sus alumnos:
“Profesoranchik kamachiwachkanchik quellqananchiksi tukuy iman yachasqanchikta llanqtanchi kausakusqanta”.
Que sería lo siguiente:
“Nuestra profesora nos está ordenando que debemos escribir todo lo que sabemos de la vida (historia) de nuestro pueblo.”
También podríamos constatar que algo no será suficiente, entonces emplearíamos kamaq así:
“Mamay paqo millmaykipa manan kamanqachu punchuchayki usianaypaq.”
Lo que en castellano sería:
“Mamita, tu lana de alpaca no alcanzará (no será suficiente) para terminar tu ponchito.”
Sin embargo en una transacción monetaria no se suele usar Kamaq. Tampoco, cuando se trata de igualarse o sobrepasar a otro. En esos casos, cuando lo que se trata de hacer es alcanzar, se emplea más bien AYPAQ.
Así tenemos por ejemplo, sí un niño pide en una panadería, con veinte centavos, diez panes, y cada pan vale diez centavos, el panadero le dirá:
“Qollqeki aypanchu chunka tantapaq.”
“Tu dinero no alcanza para comprar diez panes.”
O, en una carrera, alguien que está detrás del primero, podría decirle a este:
“Ayparusayki.”
“Te alcanzaré.”
Así la acepción, el sentido, y el sentimiento de lo que es kamaq, es fundamentalmente el de hacer que lo que tenemos, lo que disponemos, sea suficiente, y no de cualquier manera, sino para todos. Esa es su alma, su ánimo, eso es el AMA, que está en su centro, en su adentro. Por ello está vinculado con lo que es lo adecuado, y también con la crianza.” ()
Así tenemos que a Kamaq, se le traduce por “ordenar”, “mandar”, “ley”, “administrar”, “regalar”, que curiosamente coincide con las distintas maneras como han traducido la raíz griega “nom”, sin lograr una interpretación totalmente cabal en muchos casos.
Entendemos y sentimos que lo que dice la raíz griega “nom”, dice algo muy parecido a lo que nosotros sentimos y decimos en kechwa y aymará con “ama” y con “kamaq”. De hecho, no debe ser exactamente lo mismo, pero, por lo menos son parientes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario